Título: “Castillos de fuego“ Autor: Ignacio MARTÍNEZ de PISÓN Editorial: Seix Barral Temática: Novela Contemporánea Nº de páginas: 704 Edición: 2023 |  |
Sinopsis
Madrid, 1939-1945. Muchos luchan por salir adelante en una ciudad marcada por el hambre, la penuria y el estraperlo. Como Eloy, un joven tullido que trata de salvar de la pena de muerte a su hermano encarcelado; Alicia, taquillera en un cine que pierde su empleo por seguir su corazón; Basilio, profesor de universidad que afronta un proceso de depuración; el falangista Matías, que trafica con objetos requisados, o Valentín, capaz de cualquier vileza con tal de purgar su anterior militancia. Costureras, estudiantes, policías: vidas de personas comunes en tiempos extraordinarios.
Castillos de fuego es una novela que encierra más verdad que muchos libros de Historia y que transmite el pulso de un tiempo en el que el miedo casi arrasa con la esperanza que, de forma natural, se abre camino entre la devastación. Una época de reconstrucción en la que la guerra ha acabado solo para algunos pero en la que nadie está a salvo, ni los que se alzaron a los pies del dictador ni los que lucharon por derrocarlo.
El autor
Zaragoza 1960
Escritor y guionista español nacido en Zaragoza en 1960, Ignacio Martínez de Pisón se licenció en Filología Hispánica por la Universidad de Zaragoza y en Filología Italiana por la Universidad de Barcelona.
| Escribió numerosos artículos, publicados en revistas especializadas y en la prensa periódica, y diversas novelas caracterizadas por la flexibilidad estilística y la notable profundización psicológica en el carácter de sus personajes. Ha escrito guiones cinematográficos, y varias de sus obras de narrativa han sido adaptadas al cine. También ha hecho adaptaciones al teatro de sus obras. |  |
Entre sus títulos novelísticos destacan “La ternura del dragón“ (1984), “Nuevo plano de la ciudad secreta“ (1992), “Carreteras secundarias“ (1996) y “El tesoro de los hermanos Bravo“ (1996). También ha publicado los libros de relatos breves “Alguien te observa en secreto“ (1985), “Antofagasta“ (1987), “El fin de los buenos tiempos“ (1994) y “Foto de familia“ (1998).
La adaptación dramática de su relato “El filo de unos ojos“ fue estrenada en el Teatro María Guerrero de Madrid en 1990. En 1998 obtuvo con su libro “Foto de familia“ el Premio NH al mejor libro de relatos publicado en el año.
En 2000 publicó “María bonita“, una novela donde narra los sueños de una niña que cuenta con la complicidad de su tía para hacerlos realidad, y en 2003 dio a la imprenta “El tiempo de las mujeres“, una novela compleja y ambiciosa, donde relata la historia de tres hermanas sobre el telón de fondo de la transición democrática española. Novela de formación o Bildungsroman femenino que utiliza tres diferentes narradoras en primera persona, donde el verdadero tema es la coincidencia entre maduración y soledad y la trama va avanzando desde el inicial humor al desencanto y el drama.
En 2005 dio un giro de ciento ochenta grados a su producción literaria con “Enterrar a los muertos“, una obra más cercana al ensayo que a la narrativa. Es una de sus novelas más populares, en la que recrea un hecho real acaecido en la Guerra Civil, narrando las pesquisas del escritor estadounidense John Dos Passos tras el asesinato de su traductor y amigo José Robles Pazos.
Otra de sus obras, “Carreteras secundarias“, ha sido adaptada al cine tanto en España, por Emilio Martínez Lázaro, como en Francia, por Manuel Poirier.
Martínez de Pisón firmó el guión de la película “Las trece rosas“, también dirigida por Martínez Lázaro. Las trece rosas está ambientada en el período inmediatamente posterior a la Guerra Civil, narrando el proceso judicial de un grupo de chicas acusadas de pertenecer a las Juventudes Socialistas Unificadas, además de haber repartido propaganda subversiva al régimen dirigido por Francisco Franco. Martínez de Pisón fue nominado al premio Goya al Mejor Guión Original por este trabajo.
Le fue otorgado el Premio Nacional de Narrativa 2015 gracias a su novela “La buena reputación“ (2014). Es considerada por muchos como la consagración definitiva de Ignacio como escritor. El jurado del premio la calificó como “un retrato del mundo judeo-español en Melilla en la época del Protectorado y el complejo desarrollo de una red de relaciones familiares en el marco de un relato extenso muy fiel a la tradición novelesca”.
También ha publicado el libro de relatos “Aeropuerto de Funchal“ (2009), la novela de no ficción “Filek. El estafador que engañó a Franco“ (2018), donde presenta una investigación sobre un personaje real, un falso inventor de una gasolina sintética que triunfó en la España de 1939.
También de 2018 es la premiada adaptación televisiva de su novela “El día de mañana“ (2011), estrenada en Movistar Plus y dirigida por Mariano Barroso. La novela que aborda el apasionante período de los años 60 y 70, observando, el impacto que la historia colectiva tuvo en la individual, es decir, en la realidad de la gente común. Cobra vida la atmósfera incierta y fascinante de una época en la que todo parecía posible.
En 2020 regresó a la ficción y publicó "Fin de temporada" es una novela sobre la fuerza, a veces envenenada, de los lazos de sangre; sobre secretos familiares que hacen que cada generación se vea abocada a repetir ciertos errores, y sobre cómo saber nos transforma en otras personas. Traza personajes memorables y una relación madre e hijo extraordinaria en esta historia, que recorre casi un cuarto de siglo, y nos descubre que el pasado no resuelto es una trampa vital aunque intentemos ignorarlo, o precisamente por ello.
En 2023 publica “Castillos de fuego", extensa novela que recrea los primeros años del franquismo en España entre 1939 y 1945. Ambiciosa novela coral en la que mezcla una soberbia y documentada ambientación histórica con el fascinante devenir de un puñado de personajes inolvidable, y que supone la culminación de una gran trayectoria literaria coronada por libros tan celebrados por crítica y público como La buena reputación, El día de mañana y Dientes de leche.
Martínez de Pisón ha conseguido un gran número de premios, entre los que sobresalen el Premio Torrente Ballester, el Premio de las Letras Aragonesas, el Premio de la Crítica de la Narrativa Castellana o el Premio Ciutat de Barcelona.
Comentario
“Castillos de fuego“, novela realista en la que Pisón realiza un retrato descarnado de un tiempo brutal. Ambientada en Madrid, una ciudad devastada por la Guerra Civil que acaba de terminar. Aborda los 6 primeros años (1939 a 1945) del franquismo, el período más violento y sanguinario, en tiempos de paz, de nuestra historia reciente, acercándonos a la profunda degradación que todo lo penetraba, reflejando la terrible purga franquista, con miles de fusilamientos y asesinatos, más de cincuenta mil muertos. En una España partida en dos, donde los vencedores utilizaron la victoria para servirse de la ciudad como de un botín, mientras, los perdedores empleaban todo su talento en tratar simplemente de sobrevivir y llegar al día siguiente. La novela refleja como el MIEDO va cobrando cuerpo y penetrando en todos los personajes.
No se libran tampoco los pocos antifranquistas que quedan ocultos en el monte o la ciudad, sujetos a la disciplina dictada por el PCE, que exigía a sus soldados, ejecutar a sus propios camaradas cuándo quedaban manchados por la sospecha de la traición.
"Castillos de fuego" mezcla sucesos que pasaron en realidad y tramas inventadas. Nos narra básicamente la historia de dos personajes antiguos miembros de las Juventudes Unificadas Socialistas (JSU), Eloy y Valentín, este al término de la guerra se pasa al otro bando, se convierte en un chivato, delata a sus antiguos compañeros y acaba de mando en la policía (para su figura el escritor se inspiró en el conocido y siniestro comisario Roberto Conesa, jefe de la Brigada Político Social). Ambos tienen destinos enfrentados, dramático el primero y siniestro el segundo. La represión, los fusilamientos diarios, la delación, la miseria, el robo de niños hijos de republicanos, la doblez y la corrupción de todos los ideales tienen sus espacios en el monte y en la ciudad, en las pensiones, talleres, cafés, cines, comisaría, cárcel, iglesias...
El autor va construyendo los personajes, de gente normal y corriente, expuestos a una serie de circunstancias y vamos viendo cómo reaccionan, cómo van cambiando a lo largo de su peripecia, para convertirse en personas distintas a lo largo de la novela, cómo van interrelacionando y creando la trama.
Es admirable la prosa de Ignacio Martínez de Pisón porque es una escritura muy precisa que va a lo esencial, tiene también la virtud de contar las cualidades y los rasgos más significativos y elocuentes de cada personaje y de cada situación. Una excelente ambientación y descripción de la ciudad, en la que al final la trama queda un poco diluida, porque es el fondo, lo que rodea a los personajes, lo realmente importante, ya que no se trata de una novela de guerra, sino de un régimen autoritario con apoyos dentro de la sociedad.
Creo que es realmente una buena novela. Muy Recomendable su lectura.
Entrevista de Mtez. de Pisón en El País
El autor elige esta época, por lo que tiene de bárbara:
“Me fascina por lo atroz. Son los años más atroces de la España en paz. Está el deseo de venganza, las represalias, la represión, los fusilamientos. Y también las secuelas de la guerra, la miseria moral, el estraperlo…”.
Añade que le extrañó comprobar, un periodo histórico muy poco explorado por los creadores por los novelistas, que no hay muchas novelas sobre esa época.
“Durante la dictadura no se podían escribir, evidentemente, no se podía contar con libertad. Y después, pues no interesó mucho, parece. Es extraño, porque esas épocas llenas de enfrentamientos y violencia atraen a los novelistas. Pero aparte de algo de Umbral y las obras de Almudena Grandes, no encontré mucho”.
¿Y por qué Madrid?
“Porque Madrid es una metáfora del resto de España. Lo que está pasando en Madrid está pasando en el resto del país, solo que más concentrado y con más dramatismo por ser la capital. …... Estamos hablando de unos años en los que Franco fusiló a más de 50.000 personas”.
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