Título: Un Viejo Que Leia Novelas De Amor
Autor: Luís SEPULVEDA
Editorial: Tusquets Ediciones
Colección: Andanzas nº 11
Temática: Novela contemporánea
Nº de páginas: 144
Edición: 1992
Sinopsis:
El autor nos
narra la vida del protagonista, Antonio José Bolívar Proaño, utilizando como
hilo conductor del relato la relación conflictiva entre este último y el
alcalde de El Idilio, pueblo dónde vive, situado en un lugar remoto de la región
amazónica. Llegó como colono con su esposa cuando los dos eran jóvenes,
pero ella murió por las fiebres provocadas por la malaria cuándo aún no llevaba ni dos años, en ese remoto lugar.
Siendo ya mayor, Antonio José, vuelve a El Idilio, dónde se establece en una pequeña choza y se gana la vida cazando, gracias a la convivencia con los indios shuar (mal llamados jíbaros) que le enseñaron a vivir en la selva, conocer sus leyes y respetar la naturaleza y los seres que la habitan.
Un buen día decide leer, esto le lleva a descubrir su pasión
por las novelas de amor, «del verdadero, del que hace sufrir». Las novelas se las proporciona Rubicundo Loachamin, dentista que viaja en un barco que arriba dos veces al año en El Idilio. Las novelas le ayudan a distraerse en las
solitarias noches ecuatoriales de su incipiente vejez, procurando mantenerse alejado de las ambiciones
y locuras de sus convecinos blancos. Sin embargo, se ve requerido por el
avaricioso y corrupto alcalde del pueblo, apodado la Babosa, para dar caza a una *tigrilla que ha matado a varias personas. Durante la caza, Antonio José descubrirá los
verdaderos motivos que llevaron al animal a convertirse en un cazador de
hombres y le llevará a sentir una mayor comunión con el animal que con sus
congéneres.
El autor
Ovalle, 1949 (Chile) - 16 abril 2020 Oviedo (España)
Luis Sepúlveda, escritor chileno cuyo éxito se ha percibido más en el extranjero que en su tierra natal. A raíz de la publicación de la novela `Un viejo que leía novelas de amor` (1992), se convirtió en uno de los escritores latinoamericanos más leídos en todo el mundo.
Desde joven realizó numerosos viajes, de Punta Arenas a Oslo y de Barcelona a Quito. Visitó también la selva amazónica y el desierto del Sahara. Políticamente comprometido, sufrió prisión durante la dictadura de Pinochet y posteriormente abandonó el país. El exilio le llevó a Europa, donde ha ido publicando la mayoría de sus novelas y relatos, sin mostrar un especial deseo de regresar a su país, lo que le valió diversas críticas durante un tiempo. Al igual que la de Isabel Allende, su obra literaria no ha sido valorada en correspondencia con su éxito de ventas.
De su ideario político y social destaca su preocupación por el desequilibrio del planeta y por tanto de la humanidad. Pese a su compromiso político, su obra ofrece elementos menos comprometedores, más cosmopolitas, aunque contiene ciertos rasgos de moraleja y de aliento profético, al tiempo que su escritura aparece como una evolución del neorrealismo hacia nuevas tendencias. Sepúlveda se muestra admirador de Julio Verne y de Joseph Conrad, así como de los chilenos Manuel Rojas, Pablo de Rokha y Carlos Droguett. Con un lenguaje directo, de rápida lectura, cargado de anécdotas, sus libros denuncian el desastre ecológico que afecta al mundo y critican el egoísta comportamiento humano, pero también muestran y exaltan las más maravillosas manifestaciones de la naturaleza.
La obra que le dio a conocer, `Un viejo que leía novelas de amor` (1992), es una historia repleta de aventuras ambientada en la selva ecuatoriana, en el mundo de los indios shuar o jíbaros, el libro mereció los premios Juan Chabás de novela corta y Tigre Juan.
Le siguieron `Mundo del fin del mundo` (1994), sobre la criminal caza de ballenas practicada por empresas japonesas, `Nombre de torero` (1994), su primera novela negra, `Patagonia Express` (1995), un libro de viajes, el cuento `Historia de una gaviota y del gato que le enseñó a volar` (1996), pensado para sus hijos y cuyo contenido ecológico está muy bien expuesto, y finalmente el libro de relatos `Desencuentros` (1997) y la más reciente `Diario de un Killer sentimental` (1998), a través de la cual parece, según algunas interpretaciones, que el autor abre su obra a nuevos caminos.
Entre los últimos títulos de su producción se encuentran `Historias marginales` (2000), `Hot Line` (2002), novela negra protagonizada por un detective mapuche, `Los peores cuentos de los hermanos Grimm` (2004), escrito en colaboración con Mario Delgado Aparaín, y `La sombra de lo que fuimos` (premio Primavera 2009).
Luis Sepúlveda, escritor chileno cuyo éxito se ha percibido más en el extranjero que en su tierra natal. A raíz de la publicación de la novela `Un viejo que leía novelas de amor` (1992), se convirtió en uno de los escritores latinoamericanos más leídos en todo el mundo.
Desde joven realizó numerosos viajes, de Punta Arenas a Oslo y de Barcelona a Quito. Visitó también la selva amazónica y el desierto del Sahara. Políticamente comprometido, sufrió prisión durante la dictadura de Pinochet y posteriormente abandonó el país. El exilio le llevó a Europa, donde ha ido publicando la mayoría de sus novelas y relatos, sin mostrar un especial deseo de regresar a su país, lo que le valió diversas críticas durante un tiempo. Al igual que la de Isabel Allende, su obra literaria no ha sido valorada en correspondencia con su éxito de ventas.
De su ideario político y social destaca su preocupación por el desequilibrio del planeta y por tanto de la humanidad. Pese a su compromiso político, su obra ofrece elementos menos comprometedores, más cosmopolitas, aunque contiene ciertos rasgos de moraleja y de aliento profético, al tiempo que su escritura aparece como una evolución del neorrealismo hacia nuevas tendencias. Sepúlveda se muestra admirador de Julio Verne y de Joseph Conrad, así como de los chilenos Manuel Rojas, Pablo de Rokha y Carlos Droguett. Con un lenguaje directo, de rápida lectura, cargado de anécdotas, sus libros denuncian el desastre ecológico que afecta al mundo y critican el egoísta comportamiento humano, pero también muestran y exaltan las más maravillosas manifestaciones de la naturaleza.
La obra que le dio a conocer, `Un viejo que leía novelas de amor` (1992), es una historia repleta de aventuras ambientada en la selva ecuatoriana, en el mundo de los indios shuar o jíbaros, el libro mereció los premios Juan Chabás de novela corta y Tigre Juan.
Le siguieron `Mundo del fin del mundo` (1994), sobre la criminal caza de ballenas practicada por empresas japonesas, `Nombre de torero` (1994), su primera novela negra, `Patagonia Express` (1995), un libro de viajes, el cuento `Historia de una gaviota y del gato que le enseñó a volar` (1996), pensado para sus hijos y cuyo contenido ecológico está muy bien expuesto, y finalmente el libro de relatos `Desencuentros` (1997) y la más reciente `Diario de un Killer sentimental` (1998), a través de la cual parece, según algunas interpretaciones, que el autor abre su obra a nuevos caminos.
Entre los últimos títulos de su producción se encuentran `Historias marginales` (2000), `Hot Line` (2002), novela negra protagonizada por un detective mapuche, `Los peores cuentos de los hermanos Grimm` (2004), escrito en colaboración con Mario Delgado Aparaín, y `La sombra de lo que fuimos` (premio Primavera 2009).
Comentario
Esta novela narrada con un lenguaje sencillo y directo nos presenta dos cuestiones contrapuestas: la primera ver como el protagonista desarrolla el amor por la naturaleza y la segunda ese afán de riqueza del hombre civilizado y la destrucción del medio para conseguirla. Es una novela entrañable, que alaba la vida en libertad y nos lleva a reflexionar sobre el respeto a la naturaleza, a los seres vivos, a los indígenas, Sepúlveda aborda la destrucción del Amazonas: Se critica la barbarie humana, que antepone sus intereses a todo lo que le rodea, destruyendo la vida en la selva, tanto plantas como animales. Hay un claro y destacado espíritu ecologista en la novela que ya encontramos en la dedicatoria del libro:
“A Chico Mendes, recolector de caucho, sindicalista y activista ambiental brasileño, que luchó contra la extracción de madera en el Amazonas”
Resulta curioso que, en medio de la selva, el viejo se dedique a leer novelas de amor, algo totalmente inusual en su entorno, parece que con ellas intenta alejarse de los ambiciosos y destructivos forasteros que llegan al poblado. Recomendable su lectura.
“A Chico Mendes, recolector de caucho, sindicalista y activista ambiental brasileño, que luchó contra la extracción de madera en el Amazonas”
Resulta curioso que, en medio de la selva, el viejo se dedique a leer novelas de amor, algo totalmente inusual en su entorno, parece que con ellas intenta alejarse de los ambiciosos y destructivos forasteros que llegan al poblado. Recomendable su lectura.
*Tigrilla: Felino americano de cerca de un metro y medio de longitud, de pelaje de color amarillento con rayas y lunares negros en todo el cuerpo, cola anillada, orejas negras y punteadas de blanco. Se encuentra desde Arizona hasta el norte de la Argentina. Animal hermoso e inteligente, que se vuelve agresivo cuando es atacado por los seres humanos. Es el símbolo de la selva. Bolívar aprecia de este animal salvaje su inteligencia incluso más que la del hombre aparentemente civilizado.
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