lunes, 31 de mayo de 2021

"El Aleph" de Jorge Luis BORGES



Título: "El Aleph" 

Autor: Jorge Luis BORGES 

Editorial: Alianza Editorial 

Temática: Narrativa contemporánea y fantástica 

Nº de páginas: 216 

Publicación: 1949 

Edición: 2003 



Sinopsis: 
Borges: el autor infinito.
«El escritor en español más importante desde Cervantes. [...] Uno de los artistas contemporáneos más memorables. [...]La deuda que tenemos contraída con él quienes escribimos en español es enorme.»
Mario Vargas Llosa

"El Aleph" es un libro icónico de Jorge Luis Borges, el gran autor argentino admirado por García Márquez, Vargas Llosa, Banville y tantos otros escritores contemporáneos. Los cuentos que lo integran son un prodigio de puzles filosóficos, intrigas fantásticas o policíacas y personajes que se graban en la memoria, como Emma Zunz.

Este volumen reúne 17 relatos, entre ellos quizá los más elogiados y repetidamente citados. Tanto «El inmortal» como «Los teólogos», «Deutsches Requiem» y «La espera» muestran las posibilidades expresivas de la «estética de la inteligencia» borgiana, inimitable fusión de mentalidad matemática, profundidad metafísica y captación poética del mundo.



El autor
Buenos Aires, 24 de agosto de 1899 - Ginebra, Suiza, 14 de junio de 1986
Jorge Luis Borges Acevedo. Poeta, ensayista y escritor argentino. Estudia en Ginebra e Inglaterra. Vive en España desde 1919 hasta su regreso a Argentina en 1921. 

Colabora en revistas literarias, francesas y españolas, donde publica ensayos y manifiestos. De regreso a Argentina, participa con Macedonio Fernández en la fundación de las revistas Prisma y Prosa y firma el primer manifiesto ultraísta.

En 1923 publica su primer libro de poemas, "Fervor de Buenos Aires", y en 1935 "Historia universal de la infamia", compuesto por una serie de relatos breves (formato que utilizará en publicaciones posteriores). 
Durante los años treinta su fama crece en Argentina y publica diversas obras en colaboración con Bioy Casares, de entre las que cabe subrayar "Antología de la literatura fantástica". Durante estos años su actividad literaria se amplía con la crítica literaria y la traducción de autores como Virginia Woolf, Henri Michaux o William Faulkner.

Es bibliotecario en Buenos Aires de 1937 a 1945, conferenciante y profesor de literatura inglesa en la Universidad de Buenos Aires, presidente de la Sociedad Argentina de Escritores, miembro de la Academia Argentina de las Letras y director de la Biblioteca Nacional de Argentina desde 1955 hasta 1974. En 1961 comparte con Samuel Beckett el Premio Formentor, otorgado por el Congreso Internacional de Editores. Desde 1964 publica indistintamente en verso y en prosa.

Borges utiliza un singular estilo literario, basado en la interpretación de conceptos como los de tiempo, espacio, destino o realidad. La simbología que utiliza remite a los autores que más le influyen -William Shakespeare, Thomas De Quincey, Rudyard Kipling o Joseph Conrad-, además de la Biblia, la Cábala judía, las primigenias literaturas europeas, la literatura clásica y la filosofía.

A partir de 1955, Borges se dedica al relato corto, donde explotaría todo su genio y que se convertiría en el campo donde sería universalmente reconocido. También destacarían sus ensayos, en los que mezcla su erudición con un estilo inigualable.

Es posible que su obra más conocida sea la compilación de cuentos "Ficciones" (1944) que, junto con "El Aleph" (1949) y "El Hacedor" (1960), lograron el reconocimiento tanto dentro del mundo hispano como fuera de él.

Publica libros de poesía como "El otro, el mismo" (1964)"Elogio de la sombra" (1969)"El oro de los tigres" (1972)"La rosa profunda" (1975)"La moneda de hierro" (1976) y cultiva la prosa en títulos como "Manual de zoología fantástica"  (1957); "El libro de los seres imaginarios" (1967); "El informe de Brodie" (1970); "El congreso" (1971); "El libro de arena" (1975). En estos años Borges también publica libros en los que se mezclan prosa y verso, libros que aúnan el teatro, la poesía y los cuentos; ejemplos de esta fusión son títulos como "La cifra" (1981) y "Los conjurados" (1985).

Borges logró sintetizar lo absurdo de los nacionalismos y de las guerras en su poema
Juan López y John Ward.95​
Les tocó en suerte una época extraña.
El planeta había sido parcelado en distintos países,
cada uno provisto de lealtades,
de queridas memorias,
de un pasado sin duda heroico,
de derechos,
de agravios,
de una mitología peculiar,
de próceres de bronce,
de aniversarios,
de demagogos y de símbolos.
Esa división, cara a los cartógrafos, auspiciaba las guerras.
López había nacido en la ciudad junto al río inmóvil;
Ward, en las afueras de la ciudad por la que caminó Father Brown.
Había estudiado castellano para leer el Quijote.
El otro profesaba el amor de Conrad,
que le había sido revelado en una aula de la calle Viamonte.
Hubieran sido amigos, pero se vieron una sola vez cara a cara,
en unas islas demasiado famosas,
y cada uno de los dos fue Caín,
y cada uno, Abel.
Los enterraron juntos.
La nieve y la corrupción los conocen.
El hecho que refiero pasó en un tiempo que no podemos entender.

Durante treinta años no había publicado un solo verso, como para marcar una distancia definitiva con la etapa que denominó "la gran equivocación ultraísta"; y sus entregas poéticas de la madurez, como El otro, el mismo (1964), Para las seis cuerdas (1965), Elogio de la sombra (1969), El oro de los tigres (1972), La rosa profunda (1975) o La moneda de hierro (1976), admiten poemas narrativos, algunos de los cuales, como "El Golem", son auténticas ficciones que simplemente han sido redactadas en verso.

La obra de Borges se reparte también en un buen número de volúmenes escritos en colaboración, tanto dedicados a la ficción como al ensayo. Engrosan el caudal de sus escritos una gran cantidad de notas de crítica bibliográfica y comentarios de literatura, aparecidos en diferentes publicaciones periódicas argentinas y extranjeras, además de conferencias y entrevistas en las que desplegó con inteligencia y mordacidad sus puntos de vista. Se trata de una parte de su obra que, casi a la misma altura que sus libros considerados mayores, ha sido objeto recurrente de comentario y estudio por parte de la crítica y de numerosas recopilaciones.

La importancia de su obra se ve reconocida con el Premio Miguel de Cervantes en 1979.


Comentario
Esta obra está formada por 17 relatos cortos en los cuales se narran diversas tramas relacionadas con con la existencia del ser humano. Son relatos para leer con tranquilidad y pausadamente, para captar los detalles y las numerosas referencias, es una lectura compleja, no es para pasar el rato, abundan las divagaciones teológicas y metafísicas y las reflexiones profundas, especialmente sobre el infinito, una de las grandes inquietudes de Borges. Recomendable.

"El inmortal" narrado en primera persona explora el efecto que la inmortalidad causaría en los hombres.
- "El muerto", narra la historia de Benjamín Otálora, personaje ambicioso que huye de su país y se dirige al Uruguay para unirse con Azevedo Bandeira, el jefe de una banda criminal. Fue llevado al cine en la película argentina homónima.
"Los teólogos" es un sueño melancólico sobre la identidad personal que glosa la vida de dos teólogos medievales; Aureliano de Aquilea y de Juan de Panonia, rivales entre sí. Un texto de Aureliano cita a Juan, siendo causa de su condena como hereje. Borges ha comentado que este cuento es: "un sueño más bien melancólico sobre la identidad personal".
- "Historia del guerrero y la cautiva", compara dos casos de aculturación, en uno el guerrero longobardo Droctulft se pasa al bando romano ante el esplendor de esa civilización, en el otro evoca un relato familiar (recordado por la abuela inglesa de Borges) sobre una cautiva de origen inglés que decide irse a vivir con una tribu indígena.
- "Biografía de Tadeo Isidoro Cruz (1829 – 1874)", es una glosa de tipo biográfico en donde un personaje creado por Hernández, de nombre sargento Cruz del cuento de Martín Fierro.
"Emma Zunz", narra, en un tono desusado en Borges (el mismo lo calificó de "temerosa" la redacción), la venganza de la protagonista contra el responsable del suicidio de su padre.
- "La casa de Asterión", relata en primera persona las reflexiones de un personaje que habita en un laberinto, este personaje es el Minotauro del mito griego.
"La otra muerte", una fantasía sobre el tiempo que  evoca la figura de Pedro Damián, un gaucho entrerriano que participó de la batalla de Masoller; los diferentes relatos que recoge sobre este personaje le permiten argumentar sobre el tiempo y la omnipotencia divina. Hay una relación, explicitada, entre el nombre del personaje y el teólogo medieval Pedro Damián. Vale recordar que, para Borges, la teología era "una rama de la literatura fantástica"
- "Deutsches Requiem", narrado por un militar nazi a punto de ser fusilado por sus crímenes. Recapitula su vida y considera que, a pesar de la derrota de Alemania, ha triunfado la voluntad de poder destruyendo la decadente civilización occidental y cristiana.
"La busca de Averroes", imagina al filósofo hispanoárabe Averroes tratando de comprender un pasaje de la Poética de Aristóteles. El intento es descrito desde la ironía, ya que la literatura árabe carece del concepto dramático.
"El zahir", el narrador relata como llegó a tener en su mano el fabuloso objeto conocido como Zahir, en la forma de una moneda de veinte centavos. Esta moneda, que decide perder, obsesiona su pensamiento y le permite evocar otras monedas prestigiosas de la historia y la literatura, así como otros objetos que han sido, a su vez, el zahir.
"La escritura del Dios", el sacerdote mesoamericano Tzinacán de Qaholom, prisionero de los españoles de Alvarado, descubre que el dios ha dejado un mensaje críptico en la piel de los jaguares. Después de largos años descifra el mensaje en el jaguar que está encerrado en la celda vecina y sabe que ese mensaje lo hará poderoso y capaz de destruir a sus conquistadores, pero decide no usarlo porque, declara: "...Quien ha entrevisto el universo, quien ha entrevisto los ardientes designios del universo, no puede pensar en un hombre, en sus triviales dichas o desventuras, aunque ese hombre sea él...​"
"Abenjacán el Bojarí, muerto en su laberinto", una historia contada en Cornualles una tarde de verano.
"Los dos reyes y los dos laberintos", la rivalidad de dos reyes y la competencia por el poder. Cuento que trata de la asombrosa venganza de un rey contra otro que lo encerró en un laberinto.
"La espera", un hombre atormentado por su pasado.
"El hombre en el umbral", un juez inglés tratando de poner orden en conflictos indios.
"El Aleph", publicado por primera vez en 1945 y que en 1949 dio nombre al libro, es uno de los mejores cuentos de todos los tiempos y aborda uno de los temas recurrentes en la literatura de Borges: el infinito. Narra el descubrimiento del personaje Borges de un objeto en la casa de su antigua amada Beatriz Viterbo. Esta esfera de dos a tres centímetros de diámetro en el sótano de una vieja casa en la calle Garay, Buenos Aires, es el espejo y centro de todas las cosas, en el cual todo confluye y se refleja, a la vez y sin sobreposición. La cantidad de alusiones es innumerable; bien podría ser el propio universo, como dice el narrador, pero también alude a la biblioteca, y, se dice, de forma irónica al Canto general de Neruda. También puede leerse como una historia de amor con un comienzo memorable: «La candente mañana de febrero en que Beatriz Viterbo murió, después de una imperiosa agonía que no se rebajó un solo instante ni al sentimentalismo ni al miedo, noté que las carteleras de fierro de la Plaza Constitución habían renovado no sé qué aviso de cigarrillos rubios; el hecho me dolió, pues comprendí que el incesante y vasto universo ya se apartaba de ella y que ese cambio era el primero de una serie infinita»..


El aleph es la primera letra del alfabeto hebreo. De acuerdo a lo expuesto por Jaime Alazraki en Narrativa y crítica de nuestra Hispanoamérica, esta letra se corresponde a la raíz espiritual de todas las letras y, por tanto, de toda el habla humana. En la medida en que esta fue la primera letra oída en la revelación de Dios, se supone que expresa su voluntad y el universo contenido. Así, en la cábala, el aleph es un principio vital, una energía que encierra todas las posibilidades.


CRÍTICAS DIVERSAS:
«No lo cite: léalo. [...] Urge no ya leerlo o releerlo, sino, como sugería Bolaño, "releerlo otra vez".»
Gonzalo Núñez, LaRazón

«Es único. Alcanza la cumbre de la literatura universal, [...] y lo hace con sus relatos, auténticas joyas en miniatura.» 
 
Carlos Asenjo Sedano,Ideal de Granada

«Uno de los escritores más extraordinarios del siglo XX.»
The New York Times

«El escritor latinoamericano más influyente del siglo XX.»
The Washington Post

«Junto con un pequeño séquito de colegas y profetas (se me ocurren Kafka y Joyce), Borges es más que un cuentista sorprendente y un brillante estilista: es un espejo que refleja el espíritu de su tiempo.»
Chicago Tribune

«Borges, visionario escéptico, nos encanta. [...] Ha cumplido un anhelo fundamental en relación con las razones por las cuales leemos.»
Harold Bloom,Cómo leer a Jorge Luis Borges

«Borges es el escritor en español más importante desde Cervantes. [...] Uno de los artistas contemporáneos más memorables. [...]La deuda que tenemos contraída con él quienes escribimos en español es enorme.»
Mario Vargas Llosa

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