miércoles, 10 de noviembre de 2021

"Congreso de futurología" de Stanislaw LEM



Título
: "Congreso de futurología"  

AutorStanislaw LEM  

Editorial: Alianza  Editorial  

Temática: Ciencia Ficción 

Nº de páginas: 176 

Edición: 2014  

Publicación: 1971 


Sinopsis: 
Tras un período de hibernación, Tichy es reanimado en el año 2039  visita a un país latinoamericano ficticio para cubrir un magno evento y encuentra un mundo en el que impera la paz y reina un bienestar general; en esa sociedad controlada por la "psiquímica", se aprende y se ama por medio de productos químicos, los sentimientos son manipulados y toda espontaneidad ha dejado de existir. 

Bajo una apariencia exterior de abundancia y de confort, Tichy descubre, sin embargo, una realidad sobrecogedora que supera la más fantástica alucinación. Atestiguará la escalada de las tensiones políticas y sociales en Costarricania que llegarán a un máximo cuando se enfrenten diferentes bandas terroristas levantadas en armas contra la dictadura bananera del general Díaz, y se empleen incipientes armas químicas de carácter alucinógeno alrededor de un gigantesco hotel Hilton que además alberga otros congresos igual de variopintos.


El autor
Leópolis (Polonia en 1939, actualmente Ucrania) 1921  -   Cracovia, 2006

Hijo único de un matrimonio de origen judío, Stanislaw Lem inició en 1939 sus estudios de medicina, que debió abandonar tras la ocupación alemana. Los Lem lograron huir del gueto, no así la mayoría de sus familiares y amigos, que terminaron sus días en el campo de exterminio de Belzec (entre 1942 y 1943 murieron gaseadas en este campo unas 600.000 personas).

Durante la Segunda Guerra Mundial, Lem trabajó como soldador y mecánico, y traficó con armas para la resistencia polaca. En 1946 se estableció en Cracovia, ciudad que ya no abandonaría. Ese mismo año publicó su primera obra, Hombre de Marte, en una revista juvenil. Dos años después, pese a sus discrepancias manifiestas con las teorías del biólogo Trofim Denisovich Lisenko, que le reportaron no pocos quebraderos de cabeza, logró terminar la carrera de medicina en la especialidad de psicología.

A la par que ejercía como médico ginecólogo, corría el riesgo de ser incorporado a filas como médico militar y abandonó la disciplina a los pocos meses; ultimó la novela realista El hospital de la transfiguración (1948), en la que relata los avatares de unos médicos en un hospital psiquiátrico de la Polonia ocupada que intentan salvar a los enfermos de un exterminio seguro. “Abrumado por el absurdo de las circunstancias”, según diría él mismo, tras esta primera incursión abandonó el realismo social para “sortear la censura estalinista” y crear ese universo personal, de impecable factura técnica, que le daría renombre internacional.

Los temas principales de Lem giran alrededor de la cibernética (de la cual era un apasionado) y de la comunicación, tanto entre humanos como con otras formas de vida. Aunque muchas de sus obras tienen un tono humorístico innegable e inimitable, en la mayoría de ellas se encierra un profundo pesimismo respecto a la condición humana, explorando disciplinas tan dispares como la psicología, la estadística, la lógica o la física.

De la pluma de Lem surgirían, sucesivamente, títulos de referencia: Los astronautas (1951) y La nebulosa de Magallanes (1955). Con Diarios de las estrellas (1957) original obra cómica con la que comienza su vena de escritor satírico, aunque siempre guardando un profundo sentido filosófico en sus obras. Además, en ella se introduce el personaje de Ijon Tichy, ese astronauta embarcado en maravillosas (y absurdas) aventuras por todo el espacio y el tiempo, y que repetiría protagonismo en otras obras posteriores.

Tras Edén (1959), vendrá su obra maestra Solaris (1961), novela que le aupará a la fama gracias al premio recibido en 1972 en el festival de Cannes por la adaptación cinematográfica realizada por Andrei Tarkovsky. Otra novela destacable es El Invencible (1964), que también trata sobre los problemas de comunicación (y comprensión) con otras formas de vida (o simplemente de existencia).

Con Retorno de las estrellas (1961) se introduce en otro subgénero: el psicológico. Esta novela trata sobre las implicaciones del aislamiento, y de la necesidad que tiene de adaptarse a una sociedad totalmente distinta un astronauta que retorna a la Tierra tras un viaje a la velocidad de la luz. Otros relatos como los recogidos en Relatos del piloto Pirx Más relatos del piloto Pirx también se adentran en la psicología de sus personajes ante diversas situaciones a cual más desazonante.

Vuelve a la sátira más esperpéntica con Fábulas de robots (1964) y su continuación, Ciberíada (1965), que son como una especie de cuentos o fábulas en los que los protagonistas son robots, y de los que Lem se vale para criticar (veladamente) nuestra sociedad actual. En ella aparecerán también otros dos esperpénticos personajes de su obra humorística: los constructores Trurl y Clapaucio, que a su vez son robots.

La voz de su amo (1968) habla sobre la llegada de un mensaje extraterrestre que intenta ser descifrado por un grupo de científicos. A partir de ahí el autor construye una trama rocambolesca que sirve como ácida crítica del mundo científico actual.​

Dentro de su estilo satírico-reflexivo, Lem ha escrito algunas obras, como Vacío perfecto (1971) y Un valor imaginario (1973), consistentes en críticas o prólogos de libros imaginarios. Aparte de considerarse casi "experimentales", tienen el interés de descubrirnos a un Lem no solo como gran conocedor de la ciencia, sino con unas sólidas cultura y formación filósofica.

En Congreso de futurología (1971) retoma a Tichy para situarlo en un congreso de futurólogos. En Memorias encontradas en una bañera (1971) prosigue con su estilo humorístico, especialmente en la introducción, mientras que en La investigación (1959) y en Fiebre del heno (1976) toma elementos de la novela de misterio. Finalmente, Fiasco (1986) se considera su novela más reflexiva y madura.

Su obra se caracteriza por su tono satírico y filosófico. Sus libros, se han traducido a 40 lenguas y ha vendido 27 millones de ejemplares. Es considerado como uno de los mayores exponentes del género de la ciencia ficción y uno de los pocos escritores que siendo de habla no inglesa ha alcanzado fama mundial en el género.



Comentario
"Congreso de futurología" pertenece a un conjunto de relatos protagonizados por Ijon Tichy. En ella Stanislaw Lem hace un magistral retrato de la aspiración al bienestar del hombre contemporáneo, describiendo una visión distópica de lo que sucederá, aderezada de una extraordinaria ironía y mucho humor negro. La trama es una sátira donde Lem reflexiona sobre la capacidad de los gobiernos para influir en la percepción de la realidad a través de sustancias químicas. 

La narración está ambientada en un mundo futuro superpoblado, en el que la contaminación química ha hecho posible que vivan en un mundo dominado por drogas alucinógenas donde todos se dopan para conseguir la alucinación adecuada para ser felices.

Una obra compleja, interesante y estremecedora, con un inicio festivo y jocoso, donde Lem  juega con el lenguaje con maestría, inventando nombres de fármacos, empleos y verbos... Ese inicio, se va transformando, conforme vamos avanzando en la narración, en reflexiones muy inquietantes sobre un posible futuro (¿o presente?), cuestionando hasta dónde estaríamos dispuestos a llegar los seres humanos para conseguir unos ciudadanos maleables y seudofelices, inmersos en un mundo irreal (¿metaverso?). Con un final aterrador, vemos cómo todo eso puede llevar a la autodestrucción de la sociedad y del mundo que habitamos. Muy  Recomendable.



0 comentarios:

Publicar un comentario